Cambiar de opinión o de punto de vista es sano, es síntoma de madurez. A medida que la persona avanza adquiere nuevos conocimientos y experiencias que le hacen posicionarse en otra perspectiva, en muchas ocasiones totalmente contraria a la original, y que en ningún caso debemos catalogar como correcta o incorrecta. Es solo eso, un punto de vista, una opinión más que vuelve a estar sujeta a cambios.
De igual forma existen los principios y estos también se cambian. Al igual que las opiniones y los puntos de vista, es sano que cambien, que evolucionen, que se vivan, se palpen.
Criticar a quien lo hace o pensar de esa persona que no tiene personalidad o que no sabe lo que dice, que no está centrada… eso, eso si denota falta de muchas cosas.
Y por eso me identifico totalmente con la frase: Donde dije digo digo Diego.
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